
Estoy de visita en Lombardía y me dejo deslumbrar por el parque regional más antiguo de Italia, ubicado entre las provincias de
Milán,
Pavía y
Varese. Este espléndido parque, alberga una cantidad numerosa de senderos. Mamíferos, pájaros y peces viven rodeados de la exquisita arquitectura compuesta por castillos, iglesias urbanas, fortalezas y santuarios.
El objetivo principal del parque es la protección del
río Ticino y de las áreas que lo rodean. Con un ecosistema completo, entre las especies de mamíferos se observan: zorros, garduñas, jabalíes y conejos salvajes, sólo por mencionar algunos. En cuanto a los pájaros se destaca la especie acuática como: la garceta, la garza imperial, la garza real, la garcilla cangrejera y el martinete. En las aguas del río Ticino podemos encontrar alrededor de 40 especies de peces.
El parque se puede visitar en cualquier estación del año ya sea: a pié, en bicicleta o en canoa recorriendo el río. El único consejo, que podría parecer una obviedad, es el de cuidar de no alterar el equilibrio del ecosistema, interactuando de manera inoportuna con la fauna y la flora.
Desde el
Lago Mayor y hasta el Po podemos encontrar una gran variedad de museos con una importante arqueología y arquitectura religiosa compuesta de monasterios y abadías. Merece un comentario aparte en Arsago Seprio el baptisterio construido en el siglo XII. De gran interés, es el Castillo Vigevano (Castello Vigevano) constituye una de las obras fortificadas más importantes de Italia.
Este es el gran desafío del parque: ser un pulmón de aire puro cerca de las grandes ciudades industriales del norte de Italia.