Bolonia es conocida por ser sede de la Universidad más antigua de toda Europa con miles de estudiantes italianos y extranjeros que colman las calles durante todo el año. Ciudad, con una profunda identidad histórica-cultural. Asimismo, posee un importante desarrollo comercial y por ello, es sede de importanes eventos y exhibiciones que atraen a curiosos y ejecutivos de diferentes lugares del mundo. Bolonia, es también la ciudad de los pórticos, ya que cuenta con alrededor de 40 kilómetros de pórticos solamente en el centro histórico. Se piensa que tuvieron origen en el período de expansión del medioevo, ya que esta ciudad, recibió a muchos estudiosos y literatos de toda Europa y servían de reparo a estudiantes y comerciantes. Bolonia es una ciudad con mucho verde, esto hace posible que los que amen correr, siempre tengan un parque muy cerquita de casa o del trabajo. Algunos de los parques son: Giardini Margherita (en posición muy central y posee varias entradas: dos sobre viale Gozzadini y dos en Via dei Sabbioni, el recorrido completo es de aproximadamente 1600 metros); Montagnola (en el centro de Bolonia, se puede acceder por Via Irnerio o Via Independenza, el recorrido más largo dura aprox. 1600 metros). Luego, sobre la colina, se encuentra el Parco Pubblico Ghigi (se llega a través de Via dell'Osservanza o Via San Mamolo. Hay a disposición varios recorridos y el más largo es de aproximadamente 2 kilómetros). Un ciudad espléndida con circuitos naturales encantadores.
Un recorrido diferente por Bolonia es divertido. Comenzamos con un poco de shopping en Via Indipendenza, la más concurrida por turistas y habitantes. Aquí hay de todo, negocios, cines, restaurantes, bares es una ciudad dentro de otra. Recorrer las callecitas históricas de Bolonia es encantador, pequeñas calles medievales con negocios típicos repletos de enogastronomía y mercados. Encontraremos tradicionales locales de elaboración de pastas y tantos otros lugares con venta de productos típicos como mermeladas y fiambres, entre las calles: Via Drapperie y Via Caprarie. Luego, podemos llegar hasta el Vicolo Ranocchi donde hay una famosa enoteca “baretto” para degustar del buen vino y de las exquisiteces de Bolonia. Para continiuar saboreando manjares típicos de la región Emilia Romaña, les aconsejo, una clásica hostería denominada Olindo Faccioli en Via Altabella. La característica interesante de esta hostería es la tradición y originalidad de su propietario, que se comporta como los anfitriones de una época. Por las noches, les aconsejo recorrer Via del Pratello con sus diversos locales.
Si pensamos en pasta fresca en manos de los mejores cocineros, en un típico ragù alla bolognese, estamos seguramente pensando en Bolonia y su región Emilia Romaña. Esta cocina, se destaca generalmente por sus primeros platos, sin dejar de lado a sus segundos, que también son manjares. Entre las especialidades de pasta fresca encontramos los llamados "Tagliatelle" (esponjosos y livianos); los "Tagliatelle verdi" (con espinacas y en ocasiones con salsa de ortiga); la "Lasagna" al horno con el exquisito ragù, bechamel y queso gran padano; "Tortellini ", "Tortelloni" (similares a los "Ravioli") y "Cappeletti". Como segundo plato, les aconsejo probar el Gran Frito alla Bolognese y el Bollito Mixto. En cuanto a los postres, no pierdan de vista a la "Pinza"; "la Torta di Riso di Bologna" (generalmente se hace durante el período de Pascuas) y la "Zuppa Inglese". Un sinfín de especialidades, encontraremos en esta fantástica ciudad, que además de historia y arte, nos regala la exquisitez de su cocina tradicional. Por por los demás platos que no mencioné, les dejo a ustedes la posibilidad de venir, descubrirlos y saborearlos.
La Segunda Guerra Mundial (1939 -45), desafortunadamente dejó marcas profundas y amargas en diferentes lugares y personas... historias tristes y conmovedoras de personas inocentes asesinadas durante una guerra sin precedentes por la supremacía política y gubernamental de investigación... Una ciudad en particular, Marzabotto, en Emilia Romagna, quedó tristemente marcada por una terrible e indecible masacre cometida contra su pueblo por la mano alemana... fue considerada, y es, una de las mayores masacres de civiles en esa horrenda guerra. En un lamentable intento de controlar el avance de los guerrilleros partisanos (especialmente la Estrella Roja comandada por un partisano llamado «Lobo») que lucharon contra el control fascio-nazi, los soldados alemanes dispararon sin piedad a más de 1830 civiles. La desesperada población, y sintiendo el peligro, se refugió en la iglesia de Santa María Assunta... a sangre fría, los soldados nazis llegaron disparando y matando allí mismo, tres civiles y el sacerdote P. Ubaldo Marchioni, el resto de los habitantes del municipio estaban llevados al cementerio donde hombres, mujeres, ancianos y al menos 50 niños fueron asesinados despiadadamente... Los invito a conocer esta ciudad histórica, pidiendo a todos que, una vez que lleguen allí, visiten el lugar y que oren, sea cual sea su fe, en honor a las almas perdidas del 29 de septiembre de 1944.
A 750 metros de altitud. En las verdes colinas de Emilia Romagna, se encuentra Rocca di Roffeno en el municipio de Castel D'Aiano. El pequeño pueblo ofrece algunos monumentos interesantes como la Iglesia de San Martino desde 1700. La iglesia original era mucho más antigua que el siglo XII. Los restos románicos de la antigua iglesia se ven al pie del campanario. Justo fuera del núcleo habitado se encuentra la Abadía de Santa Lucia di Roffeno, probablemente del siglo X. La iglesia permaneció allí y dentro hay frescos y una cripta. El convento se construyó para ofrecer a los viajeros que viajaron a pie por la ruta Toscana Emilia la oportunidad de pasar la noche sin peligro. El paisaje es un caleidoscopio de tonos verdes. Ideal para disfrutar de una relajación total y hacer algunos paseos en moto para descubrir la zona. El ciclismo también es posible, pero tienes que trabajar mucho esfuerzo. Para apagar el cuerpo después del esfuerzo, debe visitar la granja La Fenice con un excelente restaurante. Un manjar especial se come en la Rocca durante el festival Borlengo de junio. Esta especialidad típica de las montañas es una carretera intermedia entre crepe y piadina. La piadina caliente se sazona con una mezcla caliente de tocino picado, ajo y romero y luego se espolvorea con Parmigiano Reggiano rallado. ¡Una bomba calórica de verdad! En todo el territorio se pueden realizar hermosas caminatas y, si te levantas temprano o te diriges hacia el anochecer, es fácil detectar ciervos y ciervos y oír volar halcones y buitres.