El Valle de Aosta, situado al norte de Italia, justo en la frontera con Francia y Suiza, es uno de los mejores lugares para los aficionados a la montaña. Quienes gusten de la escalada o al trekking por la montaña encontrarán aquí las mejores posibilidades, con ascensos tan renombrados como el Mont Blanc o el imponente Cervino.
Evidentemente estos dos picos son solo aptos para quienes tengan algo de experiencia en la montaña, pero la montaña de Valle D´Aosta presenta también muchas posibilidades para recorrer sus preciosos senderos, con vistas magníficas y una sensación de belleza salvaje típica de los grandes Alpes. Además la montaña de Valle D'Aosta supone igualmente un paraíso para los amantes de la bicicleta, puesto que en ellas se sitúan algunos de los puertos más conocidos del mundo del ciclismo, como el Iseran, el Champremiere, o el Gran San Bernardo, cargado de historia y dureza. Sin duda las mejores opciones para disfrutar dando pedales.
Y a la vuelta de la montaña nada mejor que disfrutar con uno de los espectaculares vinos de la zona.