En el promontorio de Capo Vaticano se extiende la playa con el homónimo nombre, caracterizada por el azul profundo de sus aguas y la playa de Formicoli con extraordinarios fondos marinos. Aquí podemos admirar la roca granítica, la fauna muy rica de colores, los corales, las margaritas de mar, entre otras especies.

Esta zona es ideal para el buceo ya sea diurno o nocturno: simplemente basta con dirigirse a una de las escuelas especializadas o a un diving center para contar con la compañía de un guía. Las playas blancas de Groticelle con arena muy fina, poseen la ventaja de que, cada año, cuentan con mayor número de turistas. Acompañan este panorama de espléndidas aguas, las escolleras.

Ricadi ofrece al turista varias estructuras receptivas, según cada exigencia: ya sean apart-hotel o casas rurales (agriturismos) en la colina. Se puede acceder hasta Grotticelle por mar o tierra, recorriendo senderos donde se descubrirán pequeñas playas para disfrutar en plena tranquilidad.

Un espejo de agua cristalina corona a Ricadi, donde los protagonistas son los fondos marinos, destino ideal para los que desean vivir momentos de relax o divertirse con el diving.