La casa colonial se pierde en un olivar en una posición realmente favorable cerca de localidades de interés artístico y turístico entre las cuales Florencia, Lucca, Pisa, Pistoia, Prato, como también las muy cercanas Montecatini Terme e Vinci, aldea natal de Leonardo. A disposición de los huéspedes hay seis apartamentos cada uno con una confortable zona con diván y cocina americana equipada; los dormitorios tienen cada uno un cuarto de baño privado. Los apartamentos se han sacado respetando y evidenciando la antigua estructura mural existente que cuenta un pedazo de historia a quien la observa. Paredes con materiales vistos, pisos de barro cocido, techos con vigas de madera y rasillas con materiales vistos, decoraciones de estilo y camas de hierro forjado llevan con la memoria a un pasado antiguo que reconcilia con el mundo y con sí mismos, sin renunciar a las comodidades a las cuales estamos acostumbrados. Cada unidad habitativa, en efecto, esta dotada de una instalación de condicionamiento de aire autónomo para los días más cálidos del año. En la parte externa, a disposición de los huéspedes, hay también una piscina para refrescarse.