
Por su historia y riqueza cultural será necesario permanecer en Roma por lo menos durante una semana. La antigua sede del
Imperio Romano, la actual capital de Italia, esconde historias y monumentos que valen la pena descubrir.
Uno de estos monumentos es el majestuoso
Mausoleo de Augusto, o Caio Giulio Cesare Ottaviano Augusto, primer emperador de Roma (31 a.C.-14d. C.). El mausoleo, lo comenzó a construir Augusto en el año 29 a.C. a su vuelta de Alejandría, tras haber conquistado Egipto después de vencer a Marco Antonio en la Batalla de Actium del año 31 a. C.
Durante su estancia en Alejandría, había visto la tumba helenística de Alejandro Magno, probablemente de planta circular, en la cual se inspiró para la constucción de su propia tumba. Marco Claudio Marcelo, sobrino de Augusto, muerto en el año 23 a. C. fue el primero en ser enterrado allí.
A través de las reproducciones de las fotos de época, se documenta cómo el Mausoleo fue utilizado durante los siglos: cantera para materiales, viñas, anfiteatro para eventos hípicos, luego, durante el novecientos fue transformado en sala de conciertos.
Tengo algo más para contarles... la etimología de la palabra Mausoleo está vinculada con Mausolo, Rey de Caria, que al morir, su viuda, la Reina Artemisa, ordenó erigir en memoria del difunto Mausolo un monumento funerario denominado Mausoleo de Halicarnasso que fue una de las siete maravillas del mundo. Ahora vengan ustedes a conocer los secretos y tesoros de Roma...