Paseando por Ravenna, parada obligada es hacer un breve paso por el Mausoleo - Tumba de Dante Alighieri, recordamos que el ilustre poeta toscano murió en Ravenna en el año 1321. Fue construida por el arquitecto Camillo Morigia en el 1780, y es aquí, donde descansan sus restos.
Por la tardecita, prepárense para tomar un exquisito aperitivo en Piazza del Popolo, una isla peatonal que encierra palacios medievales encantadores y forma parte del centro neurálgico de Ravenna. Degusten una exquisita Piadina acompañada por una buena copa de vino romagnolo. Durante el verano, Ravenna es posición stratégica, por situarse a pocos kilómetros de la costa Adriática, para diversión de muchos jóvenes italianos y extranjeros.
Para finalizar, les sugiero un paseo pensado para la familia, visiten el Planetario de Ravenna, ubicado en los jardines públicos cerca de la estación. Posee una cúpula de 8 metros de diámetro y una sala con capacidad aproximada de 56 personas. Abre todos los martes y la visita se hace con reserva previa.