Santa Croce Camerina, heredera de las colonias de Siracusa, es una ciudad del sureste de Sicilia besada por el sol. Ofrece una extraordinaria variedad de paisajes: extensiones verdes de los campos, playas de arena bañadas por las aguas cristalinas de un mar siempre azul.

Muchos y todos son de gran interés los testimonios históricos, arqueológicos y arquitectónicos repartidos por todo el territorio. El centro de Santa Croce es rico en edificios históricos y monumentos interesantes entre los que se encuentra el Palazzo di Città, con la cercana iglesia de Carmel, la Piazza Vittorio Emanuele y la Iglesia Madre.

También merece la pena visitar, fuera de la ciudad, la necrópolis de Mirio y el antiguo edificio de Mezzagnone. En la aldea de Punta Secca podemos admirar el faro, la antigua iglesia, la Torre de Scalambri y la famosa «Casa di Montalbano», famosa por las aventuras televisivas del comisario.