Me encanta Sicilia. Es la tierra perfumada con sal, sol y mar. Aquí las tradiciones se encuentran con lo moderno y cada lugar esconde algo para ver y degustar. En esta tierra privilegiada desde todos los puntos de vista, a 45 km de Trapani, se encuentra el encantador San Vito lo Capo.

Lo que atrae a los turistas de esta zona es un mar prístino con fondos marinos impresionantes. Italia tiene hermosos mares y hermosas playas en general, pero las de San Vito lo Capo se encuentran sin duda entre las más bellas de Italia. Si te gustan las playas blancas, puedes encontrarlas aquí (puedes compararlas con las del Caribe).

Si prefieres grava o rocas, no tienes que mirar lejos. Todos bañados por el mar en un increíble color esmeralda (normalmente estos efectos se consiguen con Photoshop). Alrededor de la naturaleza salvaje se extiende: la típica vegetación mediterránea: higos, algarrobos, palmeras enanas. A tiro de piedra de los verdaderos tesoros naturales de San Vito: las reservas naturales de Zingaro, Uzzo y Tonnara.

San Vito es, en cambio, un pequeño pueblo pesquero, con casas cuadradas blancas que brillan bajo el sol. Hay fuertes influencias árabes en él. Lo puedes ver especialmente durante el «Festival del Cuscús» que se celebra cada año en septiembre, donde numerosos cocineros sicilianos, egipcios, palestinos, marroquíes, argelinos y tunecinos participan en un concurso para la preparación de este delicioso plato según su gastronomía tradición.

Todo va acompañado de los mejores vinos y postres sicilianos de las tradiciones isleñas. ¿Cómo no perder la cabeza por Sicilia? Es una pregunta puramente retórica.

Ah, lo olvidé. Llévate las máscaras contigo si las tienes. Las profundidades de San Vito son ideales para el buceo: peces, crustáceos, corales, paredes, cuevas, naufragios. Todo con el telón de fondo del mar azul. ¡Pruébalo para creerlo!