
Residencias históricas las villas que surgen en Capri, lugares dónde poder retirarse inmersos en el silencio y disfrutar de la naturaleza.
Un panorama de escenografía y único característico de la isla de Capri. Es en este contexto que numerosos personajes ilustres comenzaron a construir sus propias moradas como lugar de abstracción y refugio.
Comenzamos el itinerario por la Villa San Michele en Anacapri: actualmente convertida en Museo, pertenece a la Fundación Axel Munthe.
Esta villa fue la casa del médico y escritor sueco Axel Munthe, quién se estableció en Capri durante el año 1885. Con vista al
Golfo de Capri, se divide en varios niveles. Aquí se conservan numerosos restos arqueológicos recuperados. El nombre de la villa se debe a que fue construida sobre los restos de la capilla de San Michele.
La Certosa di S. Giacomo en Capri, es un antiguo monasterio, obra de Giacomo Arcucci, edificado sobre un terreno donado por la reina Giovanna I d'Angiò. Actualmente, es sede de un Liceo Clásico, dónde se realizan conciertos y eventos. En su interno, encontramos el museo Diefenbach, dónde se conservan dos estatuas que fueron encontradas bajo agua al interno de la Gruta Azul en el año 1964.
Villa Jovis: esta antiquísima villa, atribuida al
emperador Tiberio, fue construida en el primer siglo a.C., actualmente forma parte del complejo Villa Jovis, dónde el arqueólogo Amedeo Maiuri, condujo numerosos trabajos de excavación, es aquí dónde se encuentra la Iglesia de Santa Maria del Soccorso.
La Casa Rosa en Anacapri, pertenecía al coronel estadounidense John Cay H. Mackowen, que se estableció en Anacapri durante el siglo. XIX. Actualmente, en el interno de esta residencia, se puede visitar una colección de arte permanente que representa la tradición de la isla. Se exponen telas de maestros italianos y extranjeros entre los cuales se encuentran: Benton, Federico, Barret, que enriquecen notablemente la pinacoteca de la Casa Rosa.
Terminamos nuestro recorrido visitando la Villa Damecuta. Villa de estilo imperial romano con vista al Golfo de Capri. Ubicada en
Anacapri, no se sabe con certeza sobre el emperador que la habitó. Los estudiosos suponen que fue abandonada luego de la erupción del Vesuvio.
Las villas de Capri : refugios encantadores, aristocráticos colmados de historia y encanto especial.