Su nombre oficial es "Basilica della Santissima Trinità del Cancelliere", pero se la conoce comúnmente como Basílica de la Magione . La iglesia fue fundada, junto a la abadía cisterciense, por el canciller del Reino Normando, Mateo d'Ajello, en el año 1191. Enrique VI, la donó a la Orden de los Caballeros Teutones en el año 1197, y se convirtió en la sede de la " Mansio " es decir, del tutor de la orden, de ahí el nombre de Magione. Luego, se mantuvo bajo la dirección de los comendatarios hasta el año 1787, cuando Fernando II de Borbón agregó la Basílica, con todos sus bienes, a la Orden Constantiniana de San Jorge.
Actualmente la iglesia, con su claustro anexo del siglo XII, se presenta como un ejemplo particuar del arte árabe-normando, con ventanas ojivales. También, los arcos entrelazados en el ábside, son típicos del período. Su interior es amplio; dado que se trataba de una iglesia - abadía, tenía que poseer espacio para recibir a toda la comunidad de monjes que formaban, también, parte del coro.
Predominan las líneas simples. El claustro cisterciense fue dañado por los bombardeos, pero se pueden ver aún, los restos de una torre árabe. En el centro del claustro, se ubica la base del aljibe que proviene de la reutilización de materiales del siglo XIV, especificamente de una tumba, con inscripciones en hebreo. En la capilla de Santa Cecilia, hay una preciosa ventana y sobre la columna central, encontramos una inscripción en árabe que dice: "Alá es misericordioso."