Catacombe di San Gauduso
Se cree que la catacumba del S. Gaudioso africano llegó a Nápoles en 439 tras la persecución del rey ario de los vándalos genéricos. La peculiaridad es el entierro de los cráneos del difunto empotrado en las paredes del ambulacro. El interior de la catacumba tiene frescos y mosaicos que datan del siglo V y VI y también esculturas pertenecientes a la época de la construcción de la basílica.