La ciudad de Cagliari, situada en la parte sur de Cerdeña, tiene vistas a la elegancia de los palacios, la libertad del distrito histórico de La Marina y del fascinante Golfo de Ángeles.
Cuenta la leyenda que el Golfo de Cagliari se llamaba «Golfo de Ángeles» porque los ángeles se asentaron allí: el arcángel Gabriel emergió triunfalmente del Golfo tras una larga batalla contra Lucifer, quien, inviperito lanzó la silla de su caballo sobre el promontorio de Sant'Elia, punto donde se encuentra hoy se encuentra la pintoresca cresta llamada Sella del Diavolo.
El visitante quedará encantado por el Golfo de los Ángeles con su extensión de arena fina y blanca, de los diez kilómetros de playa esmeralda de Poetto, a pocos minutos del centro de Cagliari y rodeado de aguas transparentes donde se realizan regatas internacionales de vela y catamarán cada año .
Desde Cagliari, a lo largo de la costa sur, a través de una carretera con vistas ajardinadas de imponente belleza, se puede llegar a las playas de Baia Azzurra, Mortorio, Cala Regina, Torre delle Stelle, Geremeas, Solanas, Baccu Mandara, Mare Pintau.
Las cuevas naturales forman parte integral del encantador paisaje de esta provincia. En Sadali, se encuentra una de las cavidades naturales más grandes y bellas de Cerdeña, la Cueva de Is Janas, que se encuentra a unos 3,5 kilómetros de la ciudad y se extiende hasta 240 metros. Cualquiera puede visitar la cueva ya que el viaje es muy agradable y no presenta ninguna dificultad.
Muchos cuentos populares sardos, historias que cuentan mitos y antiguas leyendas de la isla, hablan de los misteriosos janas como cuevas y bosques escondidos: algo similar a elfos y brujas. Decenas de especies animales poblan la cueva: moluscos, ciempiés, varios tipos de insectos y la especial salamandra eutrogofílica por mencionar algunos de los especímenes que se pueden encontrar allí.
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